Las características climáticas de la zona de los Palacios y Villafranca corresponden, en general, a un régimen térmico subtropical cálido, y de humedad, a un mediterráneo húmedo. Podemos decir que estamos ante un clima continental suavizado por la fase lluviosa entre octubre y marzo y las influencias marítimas a través del Valle del Guadalquivir.
La componente climática térmica de la zona se caracteriza por presentar valores relativamente altos del promedio anual, en torno 18º C, con escasas variaciones interanuales de los valores medios de las temperaturas máximas y mínimas.
Las precipitaciones acusan el típico ritmo de la franja sur del Mediterráneo en fachada oceánica, con una estación lluviosa coincidente con el periodo invernal y una amplia estación seca durante los meses cálidos que se hace extrema en Julio y Agosto. Tras el periodo de estiaje, la curva de precipitación experimenta una subida marcada en otoño para alcanzar su máximo en la estación invernal.
Los valores de humedad relativa óptima oscilan entre el 60% y el 80%. tenemos alrededor del 75% media.
En estas condiciones el cultivo del tomate se ve favorecido por esta climatología, resultando controlada los picos en la temperatura y demás factores por técnicas de cultivo de ultima tecnología.
Respecto a los vientos existe un claro dominio del eje NE_SW coincidente con la orientación del Valle del Guadalquivir. Las velocidades son débiles, siendo más fuertes cuanto más constante es el viento en primavera. Imprescindible para mantener el aire limpio y renovar la atmósfera manteniendo niveles constantes de humedad.