Don Simón elabora salmorejo y gazpacho con el tomate de Los Palacios y Villafranca
El «bombón colorao», como se conoce popularmente al exquisito tomate de Los Palacios y Villafranca, siempre ha gozado de buena fama en Andalucía por su calidad y sabor, pero desde hace unos años su prestigio está aumentando enormemente. Prueba de ello es el importante acuerdo que ha firmado la cooperativa Virgen de las Nieves, que concentra el 70% de la agricultura palaciega, con la prestigiosa marca Don Simón.
A través de dicho convenio, la cooperativa proveerá al gigante de los zumos de 1,5 millones de kilos de tomate de las variedades Panekra, Matías y Señora durante los meses de mayo y junio para elaborar salmorejo y gazpacho envasados. El acuerdo está en vigor desde principios de este mes, y cada día parten uno o dos camiones cargados con 20.000 kilos de tomate rumbo a Gador (Almería), donde Don Simón tiene una de sus fábricas.
De hecho, el salmorejo y el gazpacho obtenidos con tomate exclusivamente palaciego ya está en el mercado, teniendo una gran acogida en los consumidores según desvelan desde la propia empresa nacida en Murcia.
Vito Escalera, presidente de la cooperativa Virgen de las Nieves, considera esta firma «muy beneficiosa para nuestros intereses, ya que el hecho de vender con un precio fijo otorga tranquilidad a los agricultores».
Según el palaciego, se trata de un acuerdo pionero en España, ya que «es la primera vez en España que una empresa apueste por un tomate en exclusiva para elaborar este tipo de productos, y que además lo haga comprando la cosecha de invernaderos completos, recolectándose en la fecha idónea para que tenga todo su sabor. Se llevan la flor y nata del tomate palaciego».
Palabras que corrobora Cristóbal Pérez, jefe de compras de Don Simón, quien se muestra satisfecho por esta «fuerte apuesta por la calidad, plantando en invernadero para industria, algo muy inusual». Pérez explica que «el rendimiento por hectárea en invernadero es la mitad que al aire libre, lo cual obviamente sube los costes», pero aun así han decidido decantarse «por la calidad de este tomate con tanto prestigio y que se adapta muy bien al gazpacho, ya que tiene es muy carnoso y tiene poca agua, además de gozar de un sabor y un aroma exquisitos».
Gracias al trabajo de campo y a la gestión administrativa en los últimos años de los agricultores palaciegos, este manjar de numerosaspropiedades beneficiosas para la salud y que se puede preparar de múltiples maneras (frito, en salsa, crudo, en zumo, gazpacho, salmorejo, etc.) ha sido introducido en todas las ciudades de España y en países como Francia, Portugal y Rumanía.
Además, se ha duplicado su producción en la localidad en apenas nueve años, hasta alcanzar en 2017 los ocho millones de kilos. Sin duda, atraviesa por el mejor momento de su historia.
Asimismo, Escalera desvela el secreto del éxito por el que todas las variedades tienen un rendimiento superlativo en todos los aspectos: «hay un microclima muy particular con más temperatura en un perímetro muy localizado que incluye parte del término de Utrera que es idóneo para el cultivo, además de muy buenas tierras con mucha agua, y extraordinarios agricultores que saben perfectamente lo que se traen entre manos».
Desde finales de 2012, el tomate palaciego está registrado como «marca nacional colectiva». A partir de entonces todas las cajas aparecen con un logotipo original y con la denominación «Tomate de Los Palacios».